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La tarde parecía caerse poco a poco en pedazos, la primera lluvia fuerte del año para ser exactos 12 de febrero de 1977. 

Hacía frío, las gotas parecían atravesar los cristales de las ventanas, el té se calentaba en la cocina junto con las galletas que preparaba mi hermana, papá trabajando… que novedad, solo quedaba Rex representando al sexo masculino en la casa. ÉL siempre sentado a mis pies con ese cálido pelaje en color beige, era un hermoso labrador de 3 años. Mi hermana leyendo una revista a mi lado y yo viendo la televisión, uno de esos programas en donde pasaban videos, esperaba ansiosa ver el especial de David Bowie. En verdad que me encantaba, sobre todo esa canción que no me dejaba ni dormir por escuchar la melodía en mi mente “rabel rabel”.

-al parecer la lluvia no se quitará en toda la noche. –decía mi hermana que se aproximaba a la ventana para ver hacía el jardín delantero, el cielo literalmente se estaba cayendo en forma de tormenta.

-al parecer se te olvida que vives en Inglaterra. –dije sarcástica, pues éste clima lluvioso era el de prácticamente todos los días. 

-vamos Noelle, ¿no me digas que no te gustaría salir a un club? –me miró con cierto hartazgo en sus ojos y en sus palabras. Ella era tan inquieta que realmente no podía pasar ni media hora en un lugar, también yo lo era, pero siempre mi hermana me llevaba la delantera cuando de salir se trataba. 

-claro que sí, pero lo más probable es que no salgamos hoy –le dije resignándome a pasar la tarde y la noche sentada en la sala frente al televisor.

-pues yo no me pienso quedar aquí –se sentó en el sillón algo molesta. 

-pues adelante, salte y mójate para que te enfermes como la vez pasada que te saliste lloviendo solo por que querías ir a ver tocar el grupo del odioso de Eric –sabía que eso la haría rabiar y cambiar su expresión, pues ella vivía enamorada de ese tipo que solo se la pasaba molestándola, lo cual ella encontraba halagador, pues era el clásico niño que todas querían, pero que a nadie le hacía caso.

-¡oye! Él no es ningún odioso, sino todo lo contrario –cuando dijo esto último su expresión cambió por completo, parecía la chica más enamorada.

-¿de qué te ríes? –me dijo furiosa y cambiando de nuevo su expresión.

-de tus cambios bruscos de expresión –dije a punto de soltar una carcajada.

-¿sabías que eres la persona más molesta de todo Sheffield? No, que digo Sheffield, ¡de todo Inglaterra! –se puso de pie frente a mi tapándome toda la pantalla de la tele. Después de intentar quitarla durante unos segundos se escuchó una canción de David Bowie, fue cuando inmediatamente se quitó y se sentó junto a mí para ver la tele lo más atenta que pudo, pues también amaba a David Bowie. Quién no.

-cómo me encantaría verlo en vivo –dije entre suspiros y sin despegar mi mirada del televisor.

-algún día lo conseguiremos.

-oye, creo que se está quemando algo –se percibía un olor algo extraño que provenía en la cocina. Al decir eso mi hermana se levantó de golpe y corrió hacia la cocina, se me hizo algo raro, la seguí y vi cómo intentaba sacar las galletas del horno, una vez más se le habían quemado, lo cual hizo que me riera de ella de nuevo.

-ya déjame en paz Noelle, como si a ti nunca se te quemara la comida –automáticamente recordé la vez que se me quemó un pastel que intentaba hacerle a nuestro padre para el día de su cumpleaños. 

-era la primera vez que hacia un pastel –le dije para justificarme.

-como sea, se te quemó y punto –dijo mientras destapaba la charola de las galletas que se encontraban muy, pero muy quemadas.

-creo que Rex volverá a comer galletas estilo Layla –le dije para molestarla más, simplemente gozaba ver a mi hermana enojada, ella solo me miró con unos ojos que si pudieran me hubieran apuñalado. Tomo una galleta y me la lanzó, logré esquivarla pero la otra que me aventó casi de tras de la primera logró su objetivo  -¡oye esa si me dolió!

-de eso se trataba –dijo cínicamente.

-que conste que tu empezaste –la amenacé y tomé una manzana y se la lancé, ella me lanzó otra, así que comenzó una batalla campal en la cocina, y Rex aprovechó el momento de comer todo lo queal piso caía. Prácticamente nos quedamos sin fruta. En eso escuchamos que papá por fin había llegado, así que dejamos de comportarnos como dos mocosas de 8 años y corrimos hacia la sala.

-papá. Por fin llegaste –le dije mientras lo ayudaba a quitarse su gabardina que se encontraba completamente empapada.

-afortunadamente llegué antes de que destrozaran la casa –papá tenía ese sexto sentido que solo las mujeres lo tenían, sabía perfectamente cuando hacíamos algo malo o cuando estábamos a punto de hacerlo, Layla y yo solo nos miramos, lo cual hizo que mi padre confirmara sus palabras -no pueden pasar un segundo solas por que comienzan las guerras en la casa, el pobre de Rex no puede comerse todo lo que tiran –dijo apuntando a Rex que se encontraba aun comiéndose la última manzana que quedaba.

-te prometo que mañana temprano voy a comprar más manzanas –le dije a mi padre con una cara de vergüenza.

-está bien, no te preocupes, ¿y qué hay de cenar? –dijo animoso y mirando la cocina para ver si veía algo sano y salvo para comer.

-pues…  –me limité a decir.

-yo… bueno, pensaba hornear unas galletas, la receta de mi madre ¿la recuerdas?, deliciosas galletas por cierto –decía mi hermana con grandes ademanes.

-ya Layla por favor, dile –le dije molesta por sus clásicos rodeos.

-¡ya voy Noelle!, Pues es que las quemé –dijo bastante apenada, mi papá solo sonrió y le acaricio la mejilla.

-solo espero que alguien pueda traer una pizza con esta tormenta –al escuchar decir eso nuestro semblante cambio por completo, mi papá sí que nos sabía consolar, así que esa noche nos sentamos a cenar nuestra deliciosa pizza de pepperoni.

bueno pues aquí el primer capitulo de mi nove de Def Leppard *o* espero que les haya gustado y lo mas importante espero que la sigan leyendo xD bueno pues espero sus comentarios =) se me cuidan