08

-¡hey Sav! Tú tienes algo y no me quieres decir –lo miró Pete

-no tengo nada ya te lo dije, bueno entonces te veo más tarde para ensayar –se despidió de nosotros y se fue, algo le pasaba y no quería decirlo

-ese Sav está loco –dijo Pete mientras lo veía como se alejaba

-no seas así, solo ha de ser uno de esos días que no estas de humor –me levanté del césped y le entregué la guitarra

-debo irme Pete, gracias por todo

-no tienes nada que agradecer –me miró sonriente –ha y la guitarra es tuya –yo me sorprendí

-¿Qué dices? No como crees, claro que no la aceptaré –le insistía a dársela pero él se negaba

-en serio te la doy, mira yo casi no la uso, toco más la eléctrica y a ti te servirá más que a mí –me quedé pensativa y miré la guitarra

-está bien –le sonreí

-te acompaño a tu casa –se ofreció, al llegar a mi casa me despedí de él

-bueno pues gracias por todo –lo miré algo cohibida

-gracias a ti –me miró sonriente, no sabía que decir o que hacer –bueno me voy porque me esperan a ensayar, por cierto si quieren y si pueden ir con nosotros al ensayo estaremos en casa de Sav, él vive a espaldas de tu casa y será fácil conocer la casa, de donde salga ruido de guitarras es ahí –ambos reímos

-gracias, tal vez vayamos -¡claro que quería ir! Pero tenía que preguntarle a mi hermana            

-bueno pues espero verte –se acercó para besar mi mejilla, ese beso me puso a temblar

-hasta luego –me despedí de él y entré a mi casa

 -¡Noelle! Ya llegaste –se acercó mi hermana muy bien arreglada

-si ya volví ¿Qué ocurre? –la miré extrañada

-no sabes que paso, mira, fui a casa de mi amiga sofí y cuando Salí de su casa me encontré con Sav, nos saludamos y me acompañó hasta la casa y nos invitó a ti y a mí a ir a su ensayo y si tu no quieres ir yo si –era demasiado precipitada

-¡espera! Claro que si quiero ir de hecho a mí también me invitó Pete y venía a decirte lo mismo –ambas reímos, de pronto de quedó en silencio y miró la guitarra

-¿y eso?

-oh, es una guitarra –me reí

-que graciosa Noelle, es en serio –me miro molesta

-me la regaló Pete –me sonrojé

-vaya ya veo -comenzó a molestarme

-ya Layla, no empieces, iré a dejarla al cuarto para irnos –subí las escaleras y entré a nuestro cuarto, puse la guitarra sobre mi cama y la miré unos segundos, suspiré y Salí

-listo, vámonos

-de acuerdo –ambas salimos y nos dirigimos a la calle posterior a la nuestra, y como Pete me dijo, pusimos nuestro sentido auditivo al 100 para escuchar algún tipo de ruido parecido al de una guitarra eléctrica pero no escuchábamos nada

-vaya, creo que nunca los encontraremos –le dije a mi hermana -¿no le pediste la dirección? –le pregunté

-emm, no –dijo sin mirarme

-vaya, que bien, de pronto escuchamos justamente de la casa donde nos habíamos detenido un ruido de platillos de batería  

-aquí es –dijo Layla para acercarse de inmediato a la puerta

-no espera –la detuve

-¡que! ¿Qué pasa? –me miro extrañada

-es que… ¿y si no es aquí? –dije temerosa

-pues ahorita lo sabremos –me dijo mi hermana sonriente y se giró para tocar la puerta, la volví a detener

-sabes que Layla mejor vámonos –dije mordiendo mi labio inferior

-¿Qué te pasa? ¿Por qué estas nerviosa? –me miró suspicazmente

-no lo estoy, es solo que… creo que no deberíamos estar aquí –dije nerviosa

-¡por dios Noelle estas nerviosa! y si quieres vete pero yo si quiero entrar –se acercó y tocó la puerta, esperó un momento yo estaba aún en la banqueta, de pronto se abrió la puerta, era una señora de aspecto muy amable y muy sonriente… de inmediato supe que era la madre de Sav pues eran muy parecidos

-¿en qué les puedo ayudar? –preguntó la señora

-buenas tardes, ¿aquí es donde vive Rick? –preguntó mi hermana

-si aquí, ¿Quiénes lo buscan? –me miro sonriente, esa señora me cayó muy bien a simple vista, sí que era afortunado en tener a una madre tan linda

-somos unas amigas de él y nos invitó –dijo mi hermana, entonces ella abriría más la puerta y le hablaría a Sav

-entren, en seguida baja ¡Rick hijo te buscan! –gritó por las escaleras, yo aún estaba parada en la banqueta, no sé porque no me atrevía a entrar 

*o* sav todo pequeñito en la foto  jajajaja ooh sav se puso celoso por que pete me habla xD jajajajaja bueno ya ._. gracias por sus comentarios =) 

07

-hola –era Pete, me saludó sonriente

-hola Pete, pasa –le dije haciéndome a un lado

- oh no, no quiero que tus padres me miren feo –dijo tímidamente

-no te preocupes, nomás estamos mi hermana y yo –dije sonriente, él se sorprendería y aceptaría entrar, saludó a mi hermana y nos sentamos en la sala

-¿Dónde están sus padres? –me pregunto mientras miraba una foto familiar de los cuatro cuando Layla tenía 5 y yo 7 años

-pues… mi madre murió hace años y mi padre de seguro que está trabajando –miré el piso, me sentía muy mal al no tener a ninguno de los dos cerca como todo el mundo

-lo siento por tu madre –me tocó el hombro

-gracias –puse mi mano sobre la de él

-¿en que trabaja tu padre? –preguntó

-pues en lo único que se puede trabajar aquí en Sheffield, en una fábrica de sol a sol –dije suspirando y mirando por la ventana

-ya veo, también mi padre trabaja en una fábrica, y un amigo mío –me dijo serio

-y ¿A dónde iremos? –le pregunté tratando de cambiarle el tema

-oh pues iremos a comprar algo para mi guitarra –me dijo sonriente

-pues vámonos –me levanté y tomé mi chaqueta

-¿ya se van? –pregunto mi hermana que seguía desayunando

-si Layla, más tarde vuelvo –me despedí de ella al igual que Pete

-si no me encuentras cuando regreses es que me fui por ahí –me grito cuando yo ya estaba más afuera que adentro

-esta niña –refunfuñé

-¿pasa algo con ella? –preguntó Pete

-no nada es solo que me preocupa a veces, sabes siempre quiere andar de un lado a otro, también yo no lo niego pero ella mas –le dije sin mirarlo

-no te preocupes todos somos así a su edad –me dijo sonriente. Salimos de mi casa y nos fuimos al centro de Sheffield a comprar las cosas que Pete ocupaba para su guitarra, unas cuerdas y una púa. Era tan gracioso me la pase muy bien con él, de regreso llegamos y nos sentamos en el césped de un parque que estaba entre mi casa y la de él para seguir platicando

-y ¿llevas mucho tocando? –le pregunté

-pues sí, ya llevo muchos años –me miró sonriente

-vaya, yo he intentado tocar pero soy un desastre –me reí

-¿Por qué lo dices?

-es que soy torpe con mis dedos –miré mis manos y el las tomaría

-claro que no, es solo cuestión de practica –me decía mientras las acariciaba lentamente, eso me produjo un escalofrió que se sintió bastante bien y que me hizo suspirar, después de varios segundos se levanto

-espérame aquí, no te vayas ya regreso –me dijo para después irse corriendo hasta su casa, vi como entró, y suspiré y me quedé arrancando tiras de pasto, en eso escuché que de nuevo se acercaba con una guitarra acústica

-¿y eso? –lo mire extrañada

-es una guitarra –me dijo mientras se sentaba de nuevo

-ya lo sé, no soy tonta pero ¿para que la traes? –vi como comenzaba a afinarla y después empezó a dar unos acordes hasta terminar tocando una de mis canciones favoritas “i’m only sleeping” de The Beatles, tenía una voz muy linda y yo como boba mirándolo –tocas y cantas muy bien –le dije sonriente y el reiría

-gracias pero hay mejores –dijo tímido –te toca –me dio la guitarra

-¿Qué? No yo no puedo… -me insistió

-anda, es fácil y yo te ayudaré – tomé la guitarra y me la acomodé, no sabía ni agarrarla, que vergüenza me dio, me estuvo enseñando lo básico pero mis torpes dedos se resistían a aprender –si practicaras todos los días lograras dominarlo –yo sonreí

-me encantaría saber tocar

-entonces yo te enseñaré, ¿Qué te parece si todos los días nos vemos en este parque para practicar? –me preguntó entusiasmado, la idea me agradó, pues lo vería a diario

-pues si no es molestia para ti… si me gustaría –dije tímidamente

-no es ninguna molestia, al contrario… bueno pues ya está, todas las tardes nos veremos aquí –me guiñó el ojo, en eso escuchamos a alguien que nos hablaba

-¡Pete! ¡Noelle! –ambos volteamos y vimos a Sav caminando hasta donde estábamos nosotros

-¿Qué hay Sav? –lo saludó Pete, él no se veía tan feliz

-hola Pete, ¿vas a ir a ensayar? –le preguntó de mala gana

-pues sí, ¿pasa algo? –lo miró extrañado por su comportamiento

-no me pasa nada –me miró- ¿tocas la guitarra? –me preguntó al verme con la guitarra de Pete

-oh no, no es de Pete, me estaba “enseñando” –dije entre risas y él se reiría conmigo, me miro unos segundos fijamente a los ojos, eso me incomodó demasiado 

06

-Layla tenemos que irnos, ya pasa de las 10.30 –le dije mirando mi reloj

-vamos Noelle quedémonos un rato más –al parecer se la estaba pasando bien

-no Layla, vámonos –me moleste un poco

-¿Por qué no se quedan un rato más? Nosotros las acompañamos a su casa –nos dijo pete, mi hermana me miraría de forma suplicante, entonces acepté. Nos quedamos ahí platicando un poco más hasta pasadas las 11 de la noche, entonces nos iríamos. Uno de sus amigos tenía una camioneta de esas donde cabía hasta el perro, subieron sus instrumentos en la parte de atrás y todos subimos, íbamos muy apretados pero no nos importó, yo me senté junto a Pete y el pondría su brazo alrededor de mis hombros con el pretexto de que no cabía y pues sí, casi no cabíamos. Cuando llegamos a nuestra casa bajamos y Pete bajo de tras de mi

-¿y tú a dónde vas? –le preguntó Sav

-ahora verás –le giñó un ojo –al parecer Sav estaba ¿celoso?

-bueno pues gracias por traernos –le dije a Pete

-espero que pronto nos vuelvan a invitar –le dijo mi hermana

-claro que sí, ustedes ya estarán con nosotros en todas nuestras presentaciones, nos han caído muy bien –dijo Pete sonriente

-bueno Noelle, me voy a meter para decirle a papá que ya regresamos –entró mi hermana dejándonos solos a Pete y a mi

-bueno pues… ¿paso por ti mañana? –me preguntó Pete algo cohibido

-si Pete, ya te dije que sí –le dije mirando al piso

-bueno entonces nos vemos mañana –se acercó a mi algo titubeante y besó mi mejilla muy suavemente, nos quedamos unos segundos sin decir nada solo mirándonos tímidamente, entonces se escucharía el claxon de la camioneta, Sav lo había tocado

-¡vámonos ya imbécil! –le grito

-pero que genio –dijo él -¡ya voy! –les gritó

-bueno, debo entrar –le dije

-está bien, mañana te veo –nos despedimos y entré a mi casa, me asomé por la ventana y vi cómo se iba la camioneta

-¡hey! –me asustó mi hermana

-¡Layla! No seas así –le dije sobresaltada

-papá aún no ha regresado –me dijo algo preocupada

-qué extraño, él siempre está aquí a las 9 –me quedé pensativa, entonces le llame a Doris para preguntarle si ella sabía algo y sí, me dijo que se había quedado en casa de uno de sus compañeros del trabajo, ella insistió en venir a dormir con nosotras pero me negué rotundamente, no quería tener nanas que nos cuidaran nuestros pasos. Subimos a nuestra recamara y cuando ya estábamos a punto de recostarnos comenzó el bombardeo de preguntas, ya se estaba tardando mi hermana

-¿Qué te traes con Pete? –me preguntó sonriente

-¿Qué traigo de qué? –le contesté indiferente

-¡ándale no te hagas! Cuéntame –siguió insistiéndome

-¿Qué quieres que te cuente? No pasó nada Layla –le dije ya más molesta

-¿ya no me tienes confianza o qué? –me dijo triste

-no es eso, es que no tiene gran importancia, solo quiso platicar conmigo para decirme que pues… le llamé la atención y me invitó a salir mañana con él a comprar unas cosas –dije precipitadamente

-¿y eso no se te hace de gran importancia? –preguntó mi hermana entre risas

-pues no –contesté seria y sin mirarla

-a ti te gusta ¿cierto? –me preguntó

-¿Qué? No, claro que no –no la miré

-claro que te gusta pero no me lo quieres decir, está bien, allá tú –se metió a la cama y ya no me dijo nada, yo me quede seria mirándola y suspiré, entonces también yo me metería a la cama me costaba mucho trabajo dormirme pues no dejaba de pensar en él, si me llamaba mucho la atención, pero de ahí a que me guste creo que no, creo que aún faltaba mucho para eso pero por lo pronto me había encantado la idea de salir con él.

Al día siguiente me levanté muy temprano, me cambié y bajé a desayunar, mi hermana seguía dormida así que no la desperté. Me preparé algo rápido y le dejé un poco a mi hermana, me senté en la sala a ver la tele me sentía muy nerviosa pero ¿Por qué? Dejé de darle importancia, en eso mi hermana bajó

-vaya, creo que le pediré a Pete que entre semana te invite para que te levantes más temprano para ir a la escuela –se burló

-ándale Layla, después no quiero que andes llorando

-cálmate yo solo decía –seguía burlándose -¿Qué hiciste de desayunar? –se acercó a la cocina

-pues huevos, no se hacer otra cosa –dije sin mirarla

-bueno, ya que –se fue a desayunar. Me estaba quedando dormida en el sillón cuando se escuchó que alguien tocaba la puerta, me levanté asustada y abrí

bueno pues ahí el capitulo =) espero que les haya gustado, se me cuidan :D

05

 -¿y cuantos años tienen? –preguntó Pete

-yo 17 y mi hermana 15 –le dije

-oh vaya, están como nosotros –miró a mi hermana- casi como nosotros

-¿también tienen 17? –le pregunte

-sí, coincidentemente todos tenemos 17, pero yo les gano a todos por meses –decía gracioso

-vaya, pues te vez más joven –dije sorprendida

-si lo sé, todos me lo dicen –decía algo molesto

-¿y estudian? –nos preguntó Sav

-si, en el colegio de Sheffield –dijo mi hermana

-¿en serio? Yo iba ahí –dijo Sav

-¿Cómo que ibas? Le pregunté

-sí, me Salí, lo mío no es el estudio –dijo cabizbajo

-y tu ¿tocas con ellos? –le pregunte a Steve

-pues no, si toco pero en otro grupo –decía, era demasiado tímido y callado, pero era demasiado atractivo, vaya que sí. Tony era aún más cohibido, de hecho se tuvo que ir primero porque tenía que ver a su novia, todos comenzaron a decir que la novia lo quería día y noche con ella. Después de casi 2 horas decidimos irnos, no se veían tan peligrosos después de todo, a mi hermana y a mí se nos quitó la desconfianza ellos no eran como los demás, o al menos esa fue la primera impresión que nos dieron

-bueno chicos, debemos irnos –les dije tomando a mi hermana del brazo

-pues las acompañamos –decía Sav acercándose a nosotras

-no muchas gracias, deben de tener cosas que hacer –dijo mi hermana

-pues no, solo salimos a dar la vuelta –dijo Pete 

-pues eso es algo que hacer, no queremos estropear sus planes –les dije entre risas

-para mí no es ni molestia ni nada, yo las acompañaré –se acercó Sav muy dispuesto a acompañarnos, le siguió Pete y Steve, a nosotras no nos quedó de otra más que aceptar. Todo el camino nos reímos, seguía Sav mirándome insistentemente ¿pero que se cree? Pensaba, al llegar a nuestra casa nos despedimos de ellos

-bueno aquí es donde vivimos –les dije mientras abría el cancel de nuestra casa

-¿en serio aquí viven? –pete miro nuestra casa

-sí ¿Por qué? –pregunto mi hermana

-pues… viven a dos cuadras de mi casa, yo vivo justamente en donde esta aquella camioneta –nos apuntó la calle y vimos la camioneta, vaya que si estaba cerca

-que pequeño es el mundo… -susurré pero me escucharían

-si lo sé, yo vivo a 5 calles pero para allá –apuntó Sav refiriéndose a las calles que estaban de tras de nuestra casa

-pero… ¿Por qué demonios nunca los habíamos visto? –preguntó mi hermana

-no lo sé, tal vez sea porque no acostumbran salir –yo comencé a reír, pues siempre salíamos, siempre

-¿Cuál fue el chiste? Por cierto, es peligroso que ustedes anden por aquellos rumbos, es peligroso –nos dijo Pete recordando la noche anterior

-no te preocupes por nosotras que nos sabemos cuidar bien –dijo mi hermana rudamente

-¿salen mucho a ese tipo de lugares? –nos preguntó Sav

-pues sí, casi todas las noches –le contesté

-vaya, nunca lo esperé de ustedes, entonces ¿están dispuestas a aceptar una invitación nuestra? –Nosotras nos quedamos sin pronunciar palabra –no se asusten, las estamos invitando a un pub donde tocamos –nos dijo Sav

-pues… -apenas iba a contestar cuando mi hermana se apresuro

-claro que sí, nosotras vamos a donde nos inviten –dijo encantada, yo necesitaba pensarlo si convenía o no seguirlos frecuentando

-bueno pues las esperamos esta noche en el pub que está en el centro de Sheffield –de inmediato supimos cual

-oh si sabemos en dónde queda –le dije

-bien pues tocaremos alrededor de las 9 pero todo empieza a las 7, espero que si puedan ir –agrego Sav

-veras que si –dijo mi hermana emocionada por la idea, le encantaba ir a esos lugares, nos despedimos de ellos y entramos a la casa, comenzamos a platicar sobre ellos y a ambas ya no nos parecieron peligrosos, comenzamos a planear lo de la noche pero recordamos un pequeño inconveniente… nuestro padre, él siempre llegaba a casa a las 9 en punto.

-¿y ahora como le haremos? –me preguntó mi hermana, ella quería ir y también yo

-no se… ¡ya se! Le llamare a su trabajo y le pediré permiso –corrimos al teléfono con la esperanza de que nos diera permiso, marqué el número y me comunicaron con él. Después de tanto suplicar y suplicar nos dio permiso aunque nos quería temprano nosotras nunca hacíamos caso a esa última petición de mi padre, de inmediato nos fuimos a arreglar y por una razón desconocida me sentía nerviosa

-listo vámonos ya –me dijo mi hermana mientras se daba los últimos toques con su cabello. Ambas salimos de la casa alrededor de las 8 pm, y al llegar al lugar vimos que había mucha gente, nos asustamos un poco por que unos tipos comenzarían a acosarnos pero tratamos de que no nos importaran. Nos fuimos hasta adelante, tocaba un grupo que no eran ellos y después de ese grupo siguieron por fin ellos, vaya que si tenían su público. Tocaban muy bien creo que yo ya me estaba convirtiendo en una gran fan de ellos y al parecer también mi hermana, pues la note muy atenta durante su presentación. Pete me vio en la segunda canción, me sonrió y yo me sentí nerviosa ¿pero porque demonios? Cuando terminaron de tocar nos invitaron a pasar a los vestidores, en un principio me negué pero después acepté

-estuvieron muy bien –les dijo mi hermana

--muchas gracias –contestó Sav. Entonces nos presentarían al vocalista y a los otros dos guitarristas, pues al baterista ya lo conocíamos, Tony el de la novia fastidiosa

-miren él es Nicholas McKay, el vocalista, ellos dos son  Peter Doubleday el guitarrista y Paul Hampshire en el bajo –nos saludaron

-hola, yo soy Noelle y ella es mi hermana Layla –nos presentamos, note que Sav me miraba como siempre lo hacía, de pronto sentí que alguien me tomaba del brazo, era Pete

-¿podemos hablar a solas? –me pidió y yo asentí con la cabeza, mi hermana se quedaría platicando con los otros chicos. Pete me llevo a la parte trasera del escenario, era el único lugar más solitario que había

-bueno… y ¿de qué quieres que hablemos? –le pregunté nerviosa

-pues… bueno sabes cuándo te vi la noche de ayer no se, me llamaste mucho la atención –pero que veloz, pensé –y pues quería saber si te gustaría salir conmigo, no se platicar, conocernos mas

-¿no crees que vas algo rápido? –pregunté seria, pero no podía negar que la idea me había encantado

-bueno si, tienes razón perdóname, olvida lo que te dije –camino a la puerta del vestidor y se detuvo para volver conmigo -¿no te gustaría acompañarme mañana a comprar unas cosas? –me quedé seria sin saber que contestarle

-pues… no sé, -lo pensé un momento

-anda, vamos –me sonrió

-bueno está bien –acepté, nos quedamos unos segundos sin decir nada solo reíamos, malditos nervios, entonces regresamos con los demás y al parecer mi hermana ya era la gran amiga de todos pues estaba de lo lindo con ellos a risa abierta 

nadie comenta D:! yo creo que ya enfade jajajajaja bueno pues si alguien le esto espero que les guste el capitulo xD se me cuidan :)

04

-¿quién diablos vive ahí? –dijo pete algo desconcertado

-no tengo idea –dijo Rick, mirando la ventana

-creo que ya las había visto antes –decía pete sin despegar los ojos de la ventana de nuestra recamara

-vámonos de aquí Pete –dijo Rick

Espera Rick, quisiera ver si se vuelven a asomar

-no lo creo Pete, será mejor que ya nos vayamos –dijo Steve, otro de sus amigos

-está bien como digas, pero yo tengo que saber quien vive aquí, creo que ya las conozco –comenzó a caminar pero de vez en cuando volvía a mirar la ventana

-si Pete, otro día, de todas formas vives aquí a 3 cuadras -dijo Rick también mirando la ventana. Cuando nos percatamos de que ya no estaban volvimos a asomarnos y los vimos caminando muy lejos

-¿Qué carajos hacen aquí? –gritó mi hermana

-no lo sé Layla, tal vez vivan por aquí cerca o no se –dije intrigada por saber

-pues ojalá que sea eso y no lo que pienso –decía mi hermana. Ese día fui al supermercado a comprar las manzanas que le prometí a mi padre, Layla decidió acompañarme  

-oye Noelle, ya que compres las cosas ¿podemos ir a…? -la detuve

-no, no vamos a ir a ningún lado más, de ahí nos regresamos para la casa –dije precipitadamente, pues no quería que nos volviéramos a meter en problemas como a noche

-está bien, como digas –me dijo molesta, en el transcurso del día no me volvió a decir nada. Ya de regreso a casa comenzó a platicar más conmigo, al entrar vimos a Doris en la cocina, hasta cierto punto odiaba que mi padre le diera toda la confianza de entrar a nuestra casa

-hola niñas, les preparo algo rápido de desayunar, me tengo que ir

-gracias Doris pero no se hubiera molestado –le dije

-para mí no es molestia, su padre me las encarga todos los días y pues hago mi deber –nos miró amorosamente

-gracias Doris –le agradeció mi hermana. Pronto nos haría nuestro desayuno y se iría dejándonos en nuestra gran soledad a mi hermana y a mí

-Noelle… -rompió el silencio mi hermana

-mmm… -le dije con comida en la boca

-¿no tienes pensado hacer algo el día de hoy? –vaya que si era inquieta mi hermana

-pues, no ¿Por qué, tu si? –le dije intencionalmente, pues ella sabía perfectamente que no podía salir ella sola

-que graciosa eres ¡eh! –yo comencé a reír

-Layla de verdad que no tengo ganas de salir el día de hoy –la miré seria

-pero  yo sí, anda llévame a alguna parte es sábado –me seguía insistiendo, yo lo pensé durante varios segundos, pues también yo me aburriría ahí sola en casa con mi hermana

-está bien, te sacaré –le dije sin mirarla

-oh gracias –casi me beso de la alegría. Después de limpiar la mesa y arreglar un poco la casa, salimos a dar una vuelta por el centro de Sheffield, compramos algunas cosas hasta que se hizo algo tarde y nos dio hambre, entonces entramos a comer a un restaurant donde frecuentábamos ir cuando no teníamos ganas de cocinar nosotras. Era nuestro lugar preferido, vendían hamburguesas y esas cosas, café, nieve, malteadas, al entrar vimos que había poca gente, así que buscamos sentarnos en nuestro lugar favorito, junto a la ventana y la rockola, pedimos nuestra comida y esperamos

-espero que hoy no llueva –me dijo Layla mirando por la ventana, estaba bastante nublado

-esperemos que no –recargué mis brazos en la mesa y los crucé, dejando caer mi cabeza entre mis antebrazos, me sentía con mucho sueño por desvelarnos anoche

-hey Noelle… -me dijo mi hermana casi en un susurro

-mmm… -no me levanté

-creo que ahí están otra vez esos chicos –al escuchar eso me levanté como resorte y comencé a buscarlos con la mirada y sí, en efecto, ahí estaban de nuevo Pete y Rick, con otros dos chicos que nunca había visto

-¿Qué hacemos Noelle? –me preguntó mi hermana

-tu haz de cuenta como si no los has visto –le dije dándoles la espalda, ella estaba nerviosa, en eso llegó nuestra comida, escuchamos como uno de ellos le llamaba a la mesera

-¡mesera! –y mi hermana inconscientemente volteo a verlos y ellos a ella

-oye Pete, ¿Qué esa no es la chica de anoche? –le preguntó Sav al verla, él la miraría y le diría que si con la cabeza

-si es Sav, y creo que la otra chica es su hermana ¿Cómo demonios dijeron que se llamaban? –preguntó Pete rascándose la cabeza

-Noelle –dijo Sav casi en un suspiro

-y ¿la otra chica? –lo miro algo divertido al darse cuenta de su suspiro

-no lo sé… creo que Layla o algo así –entonces de pronto Pete se levantó de la mesa

-¿Qué pasa? –pregunto Steve

-vamos a sentarnos con ellas –comenzó a caminar hasta nuestra mesa y de tras de él los otros tres

-Noelle, vienen para acá –al escuchar eso me sentí bastante tensa, cuando de pronto escuché la voz de uno de ellos

-hola chicas, que coincidencia ¿no creen? –nos quedamos en silencio unos segundos, vi que el que nos hablaba era Pete, así que contesté enseguida

-hola, sí que coincidencia –dije nerviosa

-¿podemos comer con ustedes? –nos preguntó, yo no dije nada y mi hermana tampoco, entonces se sentaron muy cómodamente, Pete se sentó junto a mí y otro de los chicos enseguida de él, Rick se sentó junto a mi hermana y el otro chico

-espero que no les moleste –me decía pete muy cerca de mí, eso me hizo perder la razón

-pues un poco –dijo mi hermana, yo sentí un poco de pena, pero en realidad si me molestaba que estuvieran sentados con nosotras

-¿y donde viven? –preguntó pete

-pues en una casa –contesté sarcástica, todos se reirían

-que graciosa –dijo Steve, yo lo mire unos segundos pues a él no lo conocía, vaya que era guapo

-mira, él es nuestro amigo Steven Clark, pero dile solo Steve, y él es Tony kenning, el baterista del grupo –no lo recordé en absoluto

-y yo soy Rick Savage –se presentó de nuevo Sav, hasta cierto punto me dio risa, me miró fijamente y con una sonrisa que decía más que mil palabras, al parecer le había gustado así que baje la mirada después de varios segundos. En eso llego la mesera a preguntarles a ellos que era lo que querían, pidieron su comida y comimos los seis como si nos conociéramos de mucho tiempo

solo espero que alguien este leyendo esto u.u jajajaja comenten =)  los quiero jajajaj xD