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Y así fue pasando el tiempo, llego la navidad de 1980, nosotras jurábamos que pasarían la navidad con nosotras pero no fue así, estaban en plenas promociones de su álbum “On through the night”, aparte de que se encontraban en el estudio de grabación detallando lo que sería su siguiente álbum, “pyromanía”, álbum que los catapultaría al éxito mundial.

Pasó navidad y año nuevo, yo seguía yendo a la universidad, mi hermana estaba próxima a terminar los estudios básicos, no había día que no amenazara con decir que terminaba la escuela y se iba tras de Joe, todos los días le llamaba él para saber cómo estaba, Rick y yo también hablábamos muchísimo, nos comentaban  los problemas que tenían con Pete, que no sabían ya que hacer con él, era demasiado testarudo y cada vez tomaba más, estaba deprimido por haber terminado conmigo. Hubo una gran ausencia de parte de ellos en el año de 1981, era extraño comenzaban a llamarnos muy esporádicamente al parecer estaban muy ocupados con eso del disco, y cada vez tenían más problemas con Pete, aparte las giras los absorbían demasiado, yo comenzaba a hacerme la idea de que jamás volveríamos a verlos, pues ya había pasado casi un año desde la última vez que los vimos, bueno, aunque los seguíamos viendo en revistas y televisión, eso sí, mi hermana todos los días buscaba canciones de ellos en la radio.

Tiempo después intenté seguir mi vida normal, ya había superado lo de Pete, o por lo menos ya no pensaba tanto en ello como antes, seguía yendo a la universidad, estaba a casi la mitad de mi carrera, mi hermana ya había acabado la escuela y como lo prometió no hizo tramites a ninguna universidad, cosa que molestó mucho a los señores Allen, fue cuando hablaron muy seriamente con ella y le dijeron que pues si no quería seguir estudiando que se buscara una ocupación, fue entonces que muy a regañadientes busco un trabajo y lo encontró casi de inmediato en una tienda de discos y de instrumentos musicales, ella era feliz ahí pues podía tocar los instrumentos, ella siempre soñó con aprender a tocar la guitarra al igual que yo, aunque yo era un desastre nunca aprendí a tocarla, la guitarra que me había regalado Pete la regale a un amigo de la escuela, pues yo no la seguía tocando por mis dedos torpes y no quería seguirla viendo, me recordaba al estúpido de Pete.

A principios del año de 1982 pasaron muchos cambios en ambas, entraron nuevas personas a nuestras vidas que nunca imaginamos que se quedarían tanto tiempo. El tema del amor nunca fue mi fuerte, antes de Pete había tenido una relación con otro músico que me fue de lo peor, después conocí a Pete que salió más cretino, Sav era mi esperanza, pero al parecer eso jamás iba a ser posible, al principio lo extrañaba horrores pero poco a poco con el tiempo me fui dando cuenta que con él no llegaría a nada, y mucho menos ahora que el grupo ya era famoso. Salía de la escuela, estaba lloviznando y hacia un frío de los mil demonios, iba rumbo al trabajo de mi hermana para recogerla, al llegar a la puerta me paré en la entrada para ver los discos de Def Leppard, siempre hacia eso, al parecer me gustaba torturarme, suspiré hondo y mi hermana me gritaría

-¡Noelle! Qué bueno que ya llegaste –me sacó de mi transe –voltee a verla y la vi con una guitarra en la mano charlando con un chico, era un chico guapo, fornido y mediano de estatura, cabello castaño claro muy lacio y un poco largo, unos ojos grandes color miel, al mirarme me sonrió y no me despegó la mirada

-que pasa Layla ¿lista para irnos a casa? –me acerqué

-mira te presento a Bruce –me lo señaló mi hermana, yo me quedé pasmada, el chico era lindo aunque parecía más grande de edad

-hola –me dijo a secas y me extendió la mano con una vasta sonrisa

-hola –le contesté de igual manera

-ella es mi hermana Noelle de la que tanto te hablé –le decía mi hermana, ¿de la que tanto te hable? ¿Cómo porque tiene que hablar mi hermana de mi con un extraño? Pensé

-pues mucho gusto, se ve que eres una chica muy agradable –me miró él chico fijamente, eso me puso nerviosa

-¿de dónde lo conoces Layla? –quise saber, la miré fijamente

-oh, pues resulta que él vino a comprar una guitarra hace una semana aproximadamente, él toca en un grupo, bueno no toca, canta pero quiere aprender a tocarla,  el grupo se llama samson, no son muy conocidos, el chiste es que me contó su vida en un solo día –me reí y él también – él es de Workshop, pero tiene muchos amigos y familia aquí en Sheffield –workshop era una ciudad que estaba a casi una hora de Sheffield

-¿y a que volviste? –pregunté intrigada

-pues me agradó tu hermana –la miró sonriente, al principio me daba mucha desconfianza, pero después poco a poco comencé a verlo de otra forma, ese día salimos de su trabajo y él nos acompañó, fuimos a un pequeño parque que estaba muy cerca de ahí y nos compramos unas nieves, nos contó más de su vida, nos decía que él quería triunfar pero que en el grupo que estaba sentía que nunca lo lograría. En eso se encontró con unos amigos y se saludaron, nosotras nos quedamos sentadas ahí sin saber que hacer o que decir, parecía que tenían mucho que no se veían se saludaron como muy pocas veces uno saluda a una persona.